“La mesa estaba llena de dulces, garrapiñadas, turrones y pan dulces; incluso decorada con motivos navideños muy lindos. Llegada las doce, levantamos las copas, que no eran otra cosa que jugos y gaseosas espirituosas. Sonó las campanas de noche buena, y allí estábamos abrazándonos entre lagrimones y sonrisas de brindis felices.

El Oráculo se acercó a mí y justo cuando íbamos a abrazarnos…”

El Brujo no aguanto más la risa y la soltó.

-No, en serio –retomó el Escéptico-, No se rían, fue una pesadilla horrible. ¡Nosotros brindando felices con turrones, motivos navideños!, desperté pasmado –los demás de la ronda no paraban de reírse del sueño de nuestro amigo.

-Esta bien, esta bien –habló el Oráculo-. Todos tenemos sueños nefastos alguna vez.

-Pero yo no creo en la Navidad –seguía explicando el Escéptico.

-A esta altura ninguno de nosotros cree en las celebraciones en torno a la navidad. Pero es una época excelente para reflexionar las cosas que sucedieron en el ultimo ciclo vivido.

-¿El qué?

-El año, el año 2008.

Justo en ese momento mientras el Brujo le pasaba la botella de cerveza al Poeta, apareció el Rock con un tipo alto y al parecer muy cansado.

-Hola amigos ¿cómo andan? –dijo, ver moverse al Rock era fantástico, como movimiento musical y como filosofía de vida llevaba un porte único y envidiable, frente en alto, simple y de pantalones de jeen, sin camisas a cuadros y de remera estampada con la tapa del ultimo álbum de AC/DC; estaba autografiada por Angus –. Les presento a un amigo: el año 2008.

-¡Hey! adelante señor, siéntese aquí en el cordón –lo estimuló cordialmente el Oráculo a nuestro invitado de lujo –preferimos este lugar como en los viejos tiempos -decía mientras el Escriba comía los últimos pedacitos de un pancho...

-¿Y?, ¿qué tal le fue este año? –preguntó el Brujo al 2008 - ¿Se puede preguntarle algo así a usted?.

-Sí, no hay problema. Me fue bastante raro, pasaron muchas cosas y tuve que soportar otros tantos, espero haber sido de ayuda para algunos.

-¿Y por qué esa cara larga amigo? -le preguntó el Escriba por todos nosotros dudosos.

-Es que tengo que irme, y no vuelvo más, nunca mas en toda la eternidad. –suspiró con una sonrisa secreta de felicidad-. Lo que daría por un día más entre ustedes los seres humanos.

-Usted es un inventó nuestro –le explicó el Científico Loco-, lastima que no fue bisiesto, usted nos cayó simpático. Y lastima que vague el resto de la eternidad entre la penumbra y el olvido…

-Eso es triste de escribir –dijo el Escriba mientras al Poeta se le piantaba un lagrimón, él es el mas sensible de nosotros.

Un año lleno de rock, reencuentros, amigos, mucho laburo (el que no trabaja es porque no quiere). Un año lleno de reflexiones, donde nuestra capacidad de asombro nos permitió explorar alternativas divertidas y acercarnos a entenderlas. Un año como tantos otros, bastante bueno.

-Escéptico –dijo el Oráculo-, ¿quieres dejar una ultima reflexión plasmada en la página para este año?

-Listo –dijo-, y se cruzo de brazos.

 

Nos vemos el año que viene gente, no se ilusionen… es dentro de cuatro días.

Prometemos más contenidos, crónicas, consejos, data.

Prometemos romperla.

Y que el año que viene:

Qué sea Rock…

¡¡¡Larga vida al Rock & Roll y Muerte al falso Metal!!!